Los trastornos del estado de ánimo (trastornos del humor) se conocen también como trastornos afectivos. Afecto significa estado emocional, que se expresa a través de gestos y expresiones faciales.
La tristeza y la alegría son parte de la experiencia habitual de la vida diaria, y difieren de la depresión y la manía que caracterizan a los trastornos del estado de ánimo. La tristeza es una respuesta natural a la pérdida, la derrota, el desengaño, el trauma o la catástrofe.
El estado de ánimo consiste en un estado en el que se encuentra un individuo, este puede ser positivo/agradable o negativo/desagradable. Los estados de ánimo se caracterizan por ser duraderos, desde unos cuántos minutos, hasta varias horas, semanas, y mucho más.
Las emociones y los estados de ánimo, aunque puedan parecer lo mismo, poseen diferencias muy notorias.
Estados de ánimo
• Pueden ser controlados.
• Su duración puede variar entre unos minutos, horas, e incluso días o más.
• Se presenta con una intensidad leve.
• Sus causas no son claras y las sensaciones son difusas.
• Su componente dominante son el ambiental, físico y psíquico.
Emociones
El manejo de las emociones es difícil.
• Su duración, por lo natural, no excede más de unos cuántos minutos.
• La intensidad de estas es considerable.
No obstante, el autor y psicólogo Robert Thayer propone la teoría de que el estado de ánimo se centra en dos variables, las cuales serían
Energía y tensión.
De esta forma, los tipos de estados de ánimo serían cuatro, los cuales explicaremos a continuación:
• Energía – calma
Este tipo de estado de ánimo vendría siendo el más positivo, pues la persona se siente animada, activa, tranquila, segura y contenta.
• Calma – cansancio
En este estado, la persona se siente relajada y a su vez puede estar cansada, con sueño y demás. Este estado de ánimo no se considera negativo sino positivo.
• Tensión – energía
Cuando una persona tiene este estado de ánimo, se siente llena de energía y activa. No obstante, esta vivacidad está acompañada de inquietudes y sensación de tensión. Este puede ser un estado de ánimo negativo para algunos, mientras que para otros no.
• Tensión – cansancio
A diferencia de los tipos de ánimos anteriores, este es completamente negativo. Cuando la persona se siente fatigada, tiene ansiedad, presenta nerviosismo y demás sensaciones desagradables, está en este estado.
Todos tenemos emociones, sentimientos y estado de ánimo. Forman parte de nuestra naturaleza, una maravillosa y perfeccionada máquina que nos permite funcionar y responder a situaciones que nunca son las mismas. Pero, a veces, estas respuestas nos provocan problemas en nuestra vida cotidiana, nos interfieren significativamente en nuestra visa social, laboral, o académica, y/o nos generan un malestar clínicamente significativo. Es entonces cuando se han convertido en un trastorno. Imagina por ejemplo que la emoción de enfado se dispara continuamente con tus clientes o esposa, o que no quieres levantarte de la cama durante semanas seguidas, o que lo que sientes por una persona no es correspondido pero no consigues llevar tu vida adelante sin ello.
En ese caso, te recomendamos que acudas a un especialista.